AMNISTÍA INTERNACIONAL Y LOS DERECHOS DE LOS HOMBRES: COMPRAR Y VENDER SEXO

  Por lo que se ha visto en un documento interno filtrado desde Amnistía Internacional, la organización lucha por defender a la gente que tiene que ver con la prostitución. Estamos hablando de los chulos y los clientes.
   Este documento no es un boceto inofensivo sacado del cajón de algún becario. Es un documento  político interno que define la estrategia global de la organización en el tema de la prostitución. El expresidente de EEUU escribió una carta abierta a Amnistía, porque dicha política destruye años de progreso en la lucha contra la explotación sexual. Amnistía Suecia y Amnistía Australia se han desmarcado públicamente de la política de la sede central.
  Este documento establece que criminalizar al cliente de una prostituta es un ataque contra la privacidad del individuo y contra su libertad de decisión. Asimismo, establece que el acceso a una mujer prostituida es un derecho humano fundamental. 
    AHÍ ES NADA
   Amnistía es una prestigiosa organización conocida por luchar por los derechos de los presos políticos, contra los matrimonios forzados, contra las ejecucionesumariales, etc. Ahora se dedica a hacer campaña por el derecho de los hombres a acceder a cuerpos más vulnerables que losuyos. Es difícil de entender y escandaloso al mismo tiempo. En un momento en el que el debate sobre la prostitución está encarnizado, es de extrema importancia analizar el texto de Amnistía, y comprender lo que significa adoptar esta postura, especialmente cuando es defendida por una organización que inspira a mucha gente.
   ¿Cuándo y por qué Amnistía le volvió la espalda a las víctimas para empezar a luchar por los chulos?
     En estos doce puntos veremos que:
  1. Amnistía deliberadamente confunde el conflicto de intereses de las prostitutas y sus compradores.
  2. Amnistía minimiza el alcance del tráfico humano para explotación sexual.
  3. Amnistía elude hablar de los riesgos emocionales y físicos de la prostitución y los presenta como una elección propia.
  4. Amnistía defiende la despenalización total, que ha demostrado ser un auténtico desastre en los países en los que se ha establecido.
  5. Amnistía describe la prostitución como empoderante para aquellas mujeres que viven con menos de 2,5 dólares al día.
  6. La definición de Amnistía del trabajo sexual. Que tener casa y alojamiento se acepten como remuneración (1).
  7. La definición de Amnistía del trabajo sexual. Que tener casa y alojamiento se acepten como remuneración (2).
  8. Amnistía defiende el porno en nombre del arte y la libertad de expresión.
  9. Amnistía defiende el proxenetismo como una función de apoyo.
  10. Amnistía considera que el acceso de los hombres a las prostitutas es un derecho de estos.
  11. Amnistía menciona Tratados Internacionales pero miente sobre su contenido.
  12. Amnistía defiende a los puteros porque #NotAllMen son violentos.
     Y (concluyendo) ¿por qué está Amnistía defendiendo esta postura? La respuesta es repugnante, aunque previsible.

  1. Amnistía deliberadamente confunde el conflicto de intereses de las prostitutas y sus compradores.
    "Criminalización. Las autoridades utilizan gran variedad de métodos para disuadir ciertos comportamientos, desde incentivos económicos a la imposición de sanciones penales. El propósito de esta política es que la criminalización implique medidas que castiguen a las trabajadoras sexuales y a los clientes, tales como riesgo de detención, multas o imposibilidad de conseguir subvenciones o tutela. "
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 2)
    Al agrupar las mujeres y los compradores en una entidad única, Amnistía puede fingir que una política de penalizaciones dañará a ambos. Criminalizar a las víctimas conlleva riesgos para la salud muy significativos (dificultad o imposibilidad de acceder a la seguridad social, incluyendo prevención o medicación para el VIH y otras ETTs). Esto es especialmente grave en países desarrollados. Criminalizar a las víctimas también exacerba el estigma contra ellas, la violencia policial y el rechazo social. Pero criminalizar solo al comprador permitirá que la víctima pueda acceder al sistema de salud y reciba apoyo social. Esto ya se ha demostrado con resultados positivos.
  2. Amnistía minimiza el alcance del tráfico humano para explotación sexual.
    "Este foco desproporcionado que algunos gobiernos ejercen sobre el tráfico con fines de prostitución ignora las violaciones de DDHH sufridas por la gente que ha sido traficada para hacer trabajo doméstico, la construcción, trabajo en el campo, o cualquier otro trabajo en el que sufran violaciones, explotación o violencia. Ignora que mucha gente que ha sido traficada para otras labores acaba sufriendo abuso y violencia sexual."
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 2)
    Mirando las fotos que adjuntamos abajo, este argumento parece, como poco, extraño, y como mucho, manipulador. Es normal preguntarse por qué Amnistía se queja de que las víctimas reciben "demasiada atención".
    -De acuerdo con algunas organizaciones, más del 80% de las mujeres traficadas son para prostituirlas.
    -Los presupuestos estatales para frenar el tráfico humano son insuficientes. Cada año se gasta de media unos 5 dólares por víctima, cuando ellas generan, cada una, unos 22.000 dólares al año.
  3. La prostitución en cifras"Otros se basan en el principio de autonomía para afirmar que no todos los trabajos sexuales están expuestos a la violencia. Interpretan el testimonio de las trabajadoras sexuales que dicen prostituirse libremente como evidencia de "consentimiento", ya que no existe coacción. El razonamiento que se sigue es que las circunstancias que pueden llevar a un adulto a establecer ciertas relaciones sexuales comerciales no son menos legítimas que las que llevan a otros a tomar la misma decisión sobre cómo ganarse la vida, para ellos o sus familias, o sobre cómo expresar su sexualidad".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 6)
    Amnistía parece estar ahora muy preocupada por los derechos de las trabajadoras sexuales, señalando que "no deberían ser procesadas". Eso es decir lo obvio. Cualquiera que se preocupe por los derechos de las mujeres y por los DDHH en general no defiende la criminalización de la parte más débil, en este caso, las mujeres prostituidas.
    Pero Amnistía también defiende el comercio sexual como una transacción no menos legítima que cualquier otra, o una forma de explorar la sexualidad. A cualquiera se le puede ocurrir una forma mejor de explorarla que tener que atender a entre 10 y 30 hombres al día, pero voy más allá: el trabajo sexual es trabajo forzado (como lo es la esclavitud), difícilmente es una elección profesional.
    A pesar de la dificultad para conseguir estadísticas precisas (ya que la prostitución sigue siendo ilegal y está estigmatizada) todos los datos que encontré en distintas fuentes son asombrosamente parecidos, y muy reveladores. He intentado resumir en el próximo párrafo las conclusiones de la doctora Melissa Farley. La doctora Farley ha escrito más de 35 libros sobre prostitución, y ha desarrollado su carrera durante más de 40 años en la investigación de la prostitución y trabajando con personas prostituidas, mujeres, hombres y trans. Los estudios de Farley están en la línea de los de otras agencias (Europol, el Parlamento Europeo, la OMS, estadísticas policiales, etc).
    - Entre el 65% y el 95% de las mujeres prostituidas han sido agredidas sexualmente o violadas antes de entrar en la prostitución.
    - Casi la mitad de ellas son víctimas de incesto.
    - La edad media de entrada a la prostitución es TRECE (13). Una niña de 12 o 13 años es imposible que tenga recursos emocionales y mentales suficientes para lidiar con un hombre mayor que le promete amor, seguridad y afecto.
    - Más de la tercera parte de las menores que huyen de casa acaban en la prostitución para sobrevivir. Un tercio de ellas son contactadas por algún chulo en menos de 48 horas.
    - Casi la mitad de las mujeres prostituidas sufren alguna adicción (el 83% usa heroína, cocaína, cannabis y alcohol).
    - Las mujeres prostituidas sufren desórdenes psicológicos (el 54% sufre depresión grave, y el 42% ha intentado suicidarse, al menos, una vez).
    - El 75% de las mujeres prostituidas viven o han vivido alguna vez en la calle. Esto es aún más acentuado en los EEUU, por ejemplo.
    - Entre el 70% y el 95% de mujeres prostituidas que trabajan en la calle han sido agredidas físicamente durante el ejercicio de esta actividad.
    - Casi la mitad (el 41%) fueron agredidas en un burdel que se suponía seguro para ellas.
    - Entre el 60% y el 75% de la gente en la prostitución ha sido violada.
    - Entre el 85% y el 95% quieren dejar la prostitución, pero no tienen ningún otro modo de sobrevivir.
    - En un estudio llevado a cabo sobre 859 personas de 9 países, más de las dos terceras partes de las mujeres (68%) que trabajan en strip clubs, centros de masaje o en la calle, sufren un nivel de estrés postraumático comparable al de los veteranos de guerra, víctimas de violaciones o supervivientes de tortura.
    - Por último, la prostitución legalizada aumenta la tolerancia de la violencia contra las mujeres y las niñas, y eleva la prostitución infantil. Si googleas "Copa del Mundo de Brasil y prostitución infantil" verás terribles historias de miles de niñas explotadas sexualmente durante los eventos deportivos, o cómo la violación de una niña de 13 años fue desestimada en el juzgado cuando supieron que la niña era una "trabajadora sexual", lo que significa "que sabe de qué va el tema y está informada de cuestiones sexuales".
    - De acuerdo con el American Journal de epidemiología, la tasa de asesinatos de prostitutas es 12 veces más alta que la del resto de la población. Aun así, el riesgo de muerte prematura de una prostituta (enfermedad, sobredosis...) es 77 veces más alta.
  4. Amnistía defiende la despenalización total, que ha demostrado ser un auténtico desastre en los países en los que se ha establecido.Las mujeres en la prostitución buscan condiciones de trabajo seguras y decentes, libres del estigma social, de la persecución policial, de las agresiones, de la vergüenza y de cualquier sanción, legal o no. Los clientes quieren poder acceder a mujeres jóvenes, nuevas, frescas y baratas-. Por eso es imprescindible separarlos en dos grupos distintos cuando hablamos de criminalización, un paso que Amnistía aún no ha dado. Hay un modelo político llamado el modelo nórdico, que ha existido desde hace 15 años.
    Alemania (2002) y Holanda (2000) legalizaron la prostitución y el proxenetismo. Dinamarca legalizó solo la prostitución, pero no el proxenetismo. En 1999, 
    Suecia tomó la dirección opuesta, decidiendo penalizar únicamente la compra de sexo. No se dictan cargos contra la mujer, dado que vender sexo no es considerado delito. Por tanto, las mujeres prostituidas pueden asociarse en favor de la ley sueca o contra ella. Ellas no son arrestadas, perseguidas o acosadas por la policía. Y pueden, fácilmente, denunciar a un cliente si algo va mal. Y voy más allá, bajo el modelo nórdico la violencia contra las mujeres ha decrecido sustancialmente.
    La idea básica tras la ley sueca es que, en una sociedad igualitaria, no es tolerable que un hombre pueda comprar el cuerpo de una mujer. Consideran que la mujer elige ejercer esta actividad empujada por la presión social, económica, por la falta de oportunidades o por su historia personal. Dicha ley ofrece también apoyo material y financiero para dejar la prostitución.Rápidamente, la prostitución visible se redujo a la mitad, mientras que la prostitución en internet se incrementó, pero en la misma cantidad que en los países vecinos. Al ofrecer soluciones y apoyo para quien quiera dejar la prostitución, evitaron que explotara el mercado negro.


    En Suecia, donde se ha penalizado a los clientes desde el año 1999, solo una mujer prostituida ha sido asesinada en un caso de violencia doméstica no relacionada con el ejercicio de la prostitución. Fue un caso dramático, pero comparémoslo con las 127 prostitutas asesinadas en ese mismo periodo en Holanda, donde la prostitución es legal y hay 16 millones de habitantes.
    Esta ley ha demostrado ser un arma excelente contra la trata humana. Los traficantes consideran que hoy, Suecia no es un buen lugar de negocio para ellos. Es casi imposible abrir un burdel. En un país de aproximadamente 9 millones de habitantes, hay 4 veces menos víctimas de trata que en Dinamarca, por ejemplo, con solo 4 millones de habitantes. Tiene 62 veces menos víctimas de trata que Alemania (90 millones de habitantes).
  5. Amnistía describe la prostitución como empoderante para aquellas mujeres que viven con menos de 2,5 dólares al día.
    "Despenalización del trabajo sexual: documento político
    Amni
    stía Internacional se opone a la criminalización de cualquier actividad relacionada con la compra o venta de sexo consensuado entre dos adultos. Amnistía considera que que buscar, comprar, vender y solicitar serviciosexuales pagados es un acto que debería estar libre de la intervención del estado, siempre que no exista coacción, amenazas o violencia asociada. Únicamente puede haber restricciones a dicha práctica siempre que cumplan con los DDHH (que sean por un supuesto legítimo, o para conseguirlo, proporcionadas y no discriminatoria
    s)".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 1).
    Mirando la
    s e
    stadísticas del párrafo 3, llegamos a la conclusión de que las mujeres llegan a la prostitución como forma de sobrevivir, y este intercambio se basa en la desigualdad social. Pero para centrarnos en lo dicho:
    - ¿Cómo puede demo
    strar Amnistía la ausencia de amenaza, violencia o coacción?
    - La pobreza extrema (2,5 dólare
    s al día) ¿no son una forma de coacción?
    - ¿Alguna vez algún chulo ha definido como violencia algún tipo de abu
    so psicológico o amenazas?
    - ¿Cómo y dónde cue
    stiona Amnistía la responsabilidad del putero?
    - ¿Qué 
    sistemas de monitorización propone Amnistía para asegurar que la persona prostituida ejerce libremente, de forma autónoma e informada?
    Mientra
    s que todo lo anterior no pueda resolverse de manera adecuada, nadie puede pedir que la prostitución este "libre de la intervención del estado". Amnistía, sutilmente, barre la basura bajo la alfombra.
    "Amni
    stía Internacional comprende el contexto imperfecto en el que los individuos deciden ejercer trabajo sexual (o trabajar en la mina o hacer trabajo doméstico)".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 1).
    Re
    sulta interesante que Amnistía describa el incesto, violación, drogas, o la inestabilidad económica y física como un "contexto imperfecto", y lo compare con el trabajo doméstico o trabajar en la mina, curiosamente dosectores en los que también hay explotación.
  6. La definición de Amnistía del trabajo sexual. Que tener casa y alojamiento se acepten como remuneración (1).Trabajador sexual. Muchos trabajos implican usar algún aspecto de la sexualidad para beneficio económico. A lo largo de este documento, nos referiremos como "trabajadores sexuales" a quienes intercambien actos sexuales por dinero, o cualquier otra forma de remuneración (ej. comida o alojamiento). Mientras que con "actos sexuales" no nos referimos únicamente al coito, dado el propósito de este documento, excluimos de tal definición el baile erótico y la producción de contenido explícito, como el porno, en el que todos los individuos se involucran y reciben un salario a cambio. Además, con el término "trabajador sexual" queremos ser neutros, ya que tanto hombres como mujeres pueden ofrecer servicios sexuales".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 2).
    Aquí hay tres trucos principales:
    El primero, poco a poco. Amnistía define "trabajador sexual" como neutral. Esta forma de usar las palabras disfraza el racismo, sexismo y la explotación de mujere
    s y niñas inherente a la prostitución (casi el 90% de la gente prostituida son mujeres o niñas).
    El segundo. Amnistía se esfuerza mucho en hacer que el "trabajador sexual" parezca un adulto que ha consentido y ha elegido libremente prostituirse, alguien que legítimamente cambia sexo por dinero... pero también otras formas de compensación, como comida o alojamiento. Esto no encaja mucho con la descripción de un adulto empoderado. ¿Hasta qué nivel de inhabilitación, miseria y desesperanza tiene que llegar alguien para verse forzado a intercambiar sexo por comida o alojamiento? 
    El tercero es sobre pornografía, y merece ser tratado aparte.
    "Amistía Internacional es consciente de que, en un mundo en el que tres mil millones de personas viven con menos de 2,5 dólares al día, y donde el 80% de la población mundial vive en países donde las diferencias salariales se acentúan cada vez más, los individuos llegan a hacer tratos relacionados con relaciones sexuales que, no siempre, son producto de coacción, sino un reflejo de la limitación de opciones".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 2).
    "Amnístía no juzga la elección ni intenta negarla, porque hacerlo sería ignorar que hay individuos que toman la decisión para, como mínimo, sobrevivir".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 3).
    Cuando vive
    s en una situación de pobreza extrema, "juzgar o negar la elección" parece, como poco, irrelevante. Y, de todas formas, "juzgar" no es trabajo de Amnistía Internacional, según mis últimas noticias.
    Enfocar la pro
    stitución como una forma consciente de empoderamiento, especialmente cuando efecta a mujeres y niñas que tienen que vivir con menos de 2,5 dólares al día, parece inhumano y engañoso, viniendo de una organización que actúa por los DDHH. Parece que sería mejor colaborar con los gobiernos para demandar responsabilidades que actuar así.
  7. La definición de Amnistía del trabajo sexual. Que tener casa y alojamiento se acepten como remuneración (2).
    La palabra "prostituta" ha sido sustituida por "trabajador sexual" debido a la intensa labor del lobby prosexo, bajo la excusa de suprimir el estigma que conlleva la prostitución. La intención real es esconder lo que hay detrás del "trabajo sexual". Yo prefiero seguir usando el término "mujer prostituida", ya que estason la gran mayoría. "Mujer prostituida" separa el adjetivo (y la actividad) de la persona en sí, convirtiendo la prostitución en un aspecto de su vida y no en una definición como tal.
    Igualmente, "trabajador 
    sexual migrante" se utiliza para esconder una realidad de pobreza, violencia y tráfico humano, se usa la palabra "trabajo" para que veamos un empleo ordinario, una profesión real en la industria. Para hacer que nosotras, y quienes hacen las leyes, aceptemos la explotación sexual como algo normal.
    La media no
    s expone historias de niñas de entre 13 y 17 años liberadas de la prostitución. ¿Cuándo empezaron los medios a llamar "trabajadorasexuales" a niñas que han huido de casa, que han sido abusadas y violadas, captadas y víctimas de pedófilos?
    ¡Y NO LA
    S LLAMES VÍCTIMAS!

    Decir que alguien es una víctima parece que se ha convertido en un disparate. De repente, una avalancha de psicólogos empiezan a decir que debemos evitar la victimización a toda costa.
    Denigrar el e
    status de víctima es una creación moderna del capitalismo, donde todo depende de nosotros mismos y de nuestra actitud. De acuerdo con esto, debemos ignorar la desigualdad de género y raza, así como la pobreza mundial. No debemos victimizarnos cuando estemos desempleados o enfermos y sin posibilidad de conseguir seguridad social. Recupérate o muérete, pero no te quejes.
    Sin embargo, 
    ser una víctima no significa ser débil. Una víctima de sexismo, racismo, discriminación, explotación, o injusticia, puede ver la intención del agresor y contraatacar. Llamar a la prostitución "trabajo sexual" no es otra cosa que normalizar la violencia extrema.
    El 
    sistema ha fallado a las mujeres prostituidas, no solo en su infancia y adolescencia, sino también al pedirles que se empoderen, pues esto da la vuelta a la tortilla y las hace responsables de su situación. A esto lo llaman empoderarse.
    Nadie debería avergonzar
    se de ser reconocido como una víctima.
    Por último, 
    si alguien es víctima, quiere decir que hay un delincuente. Es importante que una víctima de injusticia o violencia sea reconocida oficialmente para poder pasar página. Y lo que es más importante, ser reconocido como víctima es la única forma de acceder a la compensación económica que corresponda.
  8. Amnistía defiende el porno en nombre del arte y la libertad de expresión.
    "La pornografía y cualquier otro material sexualmente explícito se diferencian del trabajo sexual porque, además de incluir remuneración a quienes producen dicho material, no hay pagador identificable. Esta política de exclusión del porno no significa que Amnistía no condene la violencia, coacción o amenazas que pueden darse en la producción de este tipo de material. Es más, Amnistía estudiaría con detenimiento que se cumplan los DDHH en dichas producciones. El baile erótico tampoco se incluye en la categoría de trabajo sexual, puesto que ambos están considerados una forma de expresión".(Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 2).
    De
    spués de soltar el rollo sobre condenar la coacción, Amnistía admite que no considera que el porno sea trabajo sexual dado que es una "forma de expresión". Como añadido, lo excluye también porque es un trabajo pagado (¿acaso asumen que la prostitución no lo es?).
    El porno e
    s una industria de ambición y abuso que mueve alrededor de cien mil millones de dólares. El porno glorifica el abuso y la violación de las mujeres, la mayoría de ellas muy muy jóvenes. Cientos de informes, testimonios e historias personales denuncian la conexión entre la prostitución y la industria del porno. El porno no movería tal cantidad de dinero sin explotación, violencia y abuso masivos.
    Amnistía tomó la otra postura. Amnistía defiende que los vídeos de gangbang de los burdeles alemanes deberían ser clasificados como una forma de expresión artística y estar libre del escrutinio del estado.

  9. Amnistía defiende el proxenetismo como una función de apoyo.
    No crea
    s que Amnistía se ha olvidado de luchar por los derechos de los amables organizadores de la prostitución.
    "La penalización de lo
    s clientes, o de los porteros o recepcionistas, ha demostrado ser ineficaz para quienese dedican a la prostitución porque aumenta el riesgo de violencia y abuso. Es cierto que algunos aspectos del trabajo sexual se ven comprometidos, pero normalmente quienese dedican a esta actividad no buscan al mismo tiempo rutina y protección urgente. La penalización de "vivir de los beneficios de la prostitución", aunque parezca que intente afectar a quienes explotan a las trabajadorasexuales, también afecta a quienes ejercen funciones de apoyo (guardas, recepcionistas, caseros) así como a sus familias e hijos". 
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 7).
    Sí, ha
    s leído bien. La criminalización puede perjudicar las "labores de apoyo": conductores, guardas, recepcionistas... en otras palabras, dueños y custodios. En otras palabras, chulos.
  10. Amnistía considera que el acceso de los hombres a las prostitutas es un derecho de estos."En la misma línea, los hombres y mujeres que compran sexo consensuado están ejerciendo su autonomía personal. Para algunos -principalmente personas con movilidad o capacidades disminuidas, o discapacidades psíquicas que impiden interactuar normalmente- las trabajadoras sexuales son gente con la que se sienten lo suficientemente seguros para tener una relación física o expresar su sexualidad. Algunos desarrollan su autoestima en la relación con una trabajadora sexual, lo que hace mejorar su forma de disfrutar la vida y su dignidad. A un nivel muy básico, la expresión de la sexualidad es un componente primario de la experiencia humana, directamente vinculada a la salud mental y física del individuo. La interferencia del estado en la intención de un adulto de tener sexo consensuado con otro adulto es, por tanto, una interferencia deliberada en su anatomía y su salud".(Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 6)."Nótese que, de acuerdo con nuestra política, la organización se opone a la penalización de todas las actividades de compra o venta de sexo. El deseo y la actividad sexual son una necesidad básica del ser humano. Penalizar a quienes no son capaces o no pueden satisfacer esa necesidad de otra forma puede considerarse una violación del derecho a la privacidad y socavar el derecho a la libertad de expresión y a la salud".(Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 5).Si aún no te has cansado de leer mojones, te lo voy a decir sin eufemismos:
    - Los hombres compran sexo solo a mujeres liberales y autónomas que hicieron una meditada elección profesional. Vamos a ignorar que esta elección la hicieron a los 13 años, ayudadas por algún servicial pedófilo o agresor.
    - Para los hombres con alguna discapacidad, o que rechacen cualquier interacción social normal, o que odien a las mujeres (discapacidades psicosociales) las mujeres prostituidas son, básicamente, personas a las que pueden dominar y controlar. Y posiblemente sobre las que imponen su violencia reprimida (expresar su sexualidad avivada por el porno).
    - Criminalizar a los hombres que no quieren establecer una relación de igualdad con otro ser humano es una violación de la privacidad, una infracción de la libertad de expresión y de la salud.
    Amnistía no parece preocuparse por la salud mental o física de las mujeres explotadas en la prostitución o en el porno. Lo importante es defender la libertad de expresión y las necesidades de los hombres para acceder al mercado de la carne. Las mujeres prostituidas nacieron para asegurar que los hombres disfruten al máximo de todos los placeres que la vida ofrece.
    Otro argumento que apesta. Amnistía asocia a los hombres que sufren discapacidad mental o física con los sociópatas propiamente dichos (aquellos que no quieren establecer relación humana).
    No es la primera vez que este documento utiliza a determinado grupo para promover una idea asquerosa. Una injusticia (la incapacidad) no puede ser compensada con otra (la explotación de una mujer).
    Además, sugerir que todo lo que un hombre discapacitado podría querer de una relación con una mujer es alquilar su cuerpo por 30 minutos de sexo es degradante. Amnistía nos manipula para que pensemos que la única forma en la que una mujer podría interesarse por alguien discapacitado es el dinero.
  11. Amnistía menciona Tratados Internacionales pero miente sobre su contenido.En algún momento me di cuenta de la cantidad de referencias desordenadas que se hacían a informes y tratados internacionales, que normalmente no mezclan asuntos de Europa y Bangladesh.
    "El art. 6 de la Convención de Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer requiere proteger a las mujeres y las niñas de "la explotación de la prostitución". CEDAW no define los términos "explotación" o "prostitución".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 8).
    "El lenguaje utilizado en el artículo 6 
    sugiere que no todas las formas de trabajo sexual conllevan inherentemente explotación".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 9).Me imagino que no has oído hablar de CEDAW en tu vida. Yo tampoco. La Convención de Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer a la que amnistía se refiere fue firmado por las Naciones Unidas en 1979. Dice lo siguiente:
    "Los partidos gubernamentales deberán tomar las medidas necesarias, incluida legislación, para suprimir todas las formas de trata, explotación y prostitución de mujeres". Amnistía cita el artículo 6, "el lenguaje utilizado en el artículo 6 sugiere que no todas las formas de trabajo sexual conllevan inherentemente explotación". El lenguaje no sugiere nada. Al contrario, el artículo 6 abarca cualquier 
    situación en la que la mujer sea prostituida. Repetid conmigo: Amnistía. Inventa. contenido. Y. Confía. En. Que. No. Lo. Comprobemos.
  12. Amnistía defiende a los puteros porque #NotAllMen son violentos."Dicho esto, la gran mayoría de comentarios a este respecto parece indicar que el Comité opina que solo la explotación debería ser castigada, y los clientes no explotan. El Comité es muy claro acerca de lo que espera del gobierno".
    (Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 9).
    Sí. Usando el viejo mantra de que #NotAllMen son violentos, Amnistía nos dice que #NotAllClientson explotadores. Bueno, perdón, Amnistía dice que el Comité PARECE INDICAR, lo que quiera que signifique eso.Pues bien. Los  clienteson violentos. Buenos padres de familia que violan antes de volver a casa, clientes normales que golpean a una prostituta para saber qué se siente, hombres que creen tener derecho a abusar porque lo pueden pagar, digámoslo así.




Conclusión: ¿Quién se beneficia de esta política?

     Esta política propuesta por Amnistía es absurda si la comparas con la realidad. Amnistía trabaja muy duro para luchar por los derechos de las mujeres y niñas explotadas en la prostitución los clientes y los chulos. Hay otras joyitas en las 11 páginas del documento, pero vuestro tiempo es oro ;) No pude resumirlo más, gracia por vuestra paciencia.
     Imagino que los más escépticos (que hayáis llegado a la conclusión) preguntaréis: a pesar de toda esa mierda que has evacuado, esto ha sido propuesto por Amnistía Internacional, ¿no? ¿no nos querrás convencer de que la organización ha decidido defender a los puteros y a los chulos?
     Bueno, a ver, 2+2 son...
"El estado impone sanciones criminales sobre las actividades relacionadas con el trabajo sexual. Dichas sanciones se aplican sobre los dueños de los burdeles, quienes procuran o compran servicios sexuales, quienes organizan la prostitución para otros, quienes se benefician del trabajo sexual o quienes lo facilitan mediante información o asistencia. Dichas sanciones, a menudo, están vinculadas con el acto de solicitación, más que en el de vender sexo".
(Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía, p. 4).
"Nótese que, de acuerdo con nuestra política, la organización se opone a la penalización de todas las actividades de compra o venta de sexo."
(Documento Político sobre la Prostitución de Amnistía. Discreto pie de página p. 5).
Cuando el comercio sexual y el trabajo sexual se confunden.
   Habrá quien diga, "las prostitutas, ay perdón, las trabajadoras sexuales seguro que han sido consultadas en algún momento durante la elaboración de este documento". Pues sí, tenéis razón. Los "trabajadores sexuales" han sido consultados, y se van a beneficiar de esta política. Por la sencilla razón de que, según Amnistía, "trabajador sexual" no distingue entre la mujer prostituida o el dueño del burdel en el que trabaja.
     Por este motivo, Douglas Fox se llama a sí mismo "trabajador sexual" por ser dueño de una agencia de acompañantes en Gran Bretaña. Es, más, dice, con orgullo, ser uno de los autores del documento de Amnistía. También es portavoz de una asociación de "trabajadores sexuales". Exacto. Un chulo hablando en representación de las mujeres a las que explota. 
   "Conseguir que Amnistía nos apoye será un enorme apoyo moral para nosotros. Hay que presionarlos sin piedad para ponerlos de nuestro lado".

La verdad

     Las mujeres en la prostitución no están protegidas en absoluto por la legalización, y sin embargo la criminalización de los puteros sí ha dado buenos resultados.
    Puedes encontrar muchos análisis y revisiones del sistema nórdico, que desglosan sus éxitos y revela sus limitaciones. Están disponibles aquí.
     No se debería criminalizar a las mujeres prostituidas. Convertirlas en ilegales solo contribuye a su inhabilitación y evita que puedan conseguir acceso al sistema sanitario. Las hace más vulnerables, las expulsa de las ciudades, y las deja a merced de los robos y violencia de los puteros.
    Legalizar la prostitución no ayudará a quienes fueron traficadas a países del primer mundo. No conseguirán ni permiso de residencia, ni beneficios sociales.
     La penalización de los compradores permite que las mujeres consigan apoyo, cuidados y puedan denunciar si un cliente es (demasiado) violento. El 60% de las mujeres que se inscribieron en los programas sociales de Suecia consiguieron dejar la prostitución, los dueños de los burdeles no pueden llevar ningún negocio, y el estigma pasó de vender sexo al acto de comprarlo.

¿En qué podemos mejorar?

     En cualquier caso, debemos dirigirnos en primer lugar a aquellas culturas para las que el cuerpo de una mujer sea una mercancía.
   En los países en los que se ha adoptado el modelo nórdico, hay que cuidar que las leyes no se acaben usando para presionar a las mujeres. En concreto, cuando hablamos de la custodia de los hijos, o el derecho a vivienda.
  Las leyes de inmigración y tráfico deberían armonizarse para proteger a las mujeres. Nadie testificará si saben que se arriesgan a ser deportadas o incluso asesinadas. 
    De hecho, todo el sistema debería consonar a nivel global. Los traficantes tienen mucho que ganar en los países ricos de occidente. Si se reubica a los traficantes en los países vecinos, será un fallo total del sistema, y el precio lo pagarán las mujeres.
     Por último, no debería basarse la imputación solo en el testimonio de las más vulnerables. Debería basarse en la policía y en quienes rompen el círculo de la trata humana. Y posiblemente en los clientes que son testigos o participan de la explotación de la mujer.

Otras fuentes

Traductora: Marina Liñán

El artículo original, aquí publicado en el blog thinkaoutsidetheboxer 

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